El Reiki, es un método de curación donde lo fundamental es, la imposición de las manos sobre el cuerpo que se desea tratar.
El reikista actúa como canalizador de la energía universal y su objetivo es, rearmonizar los planos físico, emocional, mental y espiritual que se han desequilibrado.
Su esencia es el Amor, cada sesión de Reiki nos contacta con nuestra naturaleza espiritual y así lleva paz al corazón.
El Ki circula por nuestro cuerpo y alrededor de él; cuando su circulación se restringe, somos susceptibles a las enfermedades.
Un buen nivel de Ki circulando por dichos planos nos garantiza un buen estado de salud.
El Reiki es una propuesta ética y espiritual, llena de respeto por la vida y de generosidad hacia el semejante.
Durante las sesiones de Reiki, las manos se colocan cerca de la persona que recibe, los dedos permanecen juntos e inmediatamente
la energía fluye a todo el organismo, algunos notan una sensación de calor o vibración, todos sienten fluir la energía. Terminado el tratamiento aparece una agradable sensación de relajación, las emociones surgen y se disuelven las barreras internas que bloquean nuestro crecimiento.
El reikista es un canal para la energía universal, no aporta su propia energía al receptor.
Quien dá Energía no sufre de agotamiento y quien la recibe no perderá nada de la propia.
La Energía Vital o fuerza de la vida fluye alrededor de nuestro cuerpo energético o aura.
El Reiki puede ser usado por cualquiera, más allá de la religión que se profese; logrará satisfacer a los librepensadores y a los seguidores de las más variadas ideología. Su técnica puede ser aprendida por todos.
Es útil para autotratamientos y para sanar a otras personas, ayuda y complementa a cualquier otro tipo de terapia.
El Reiki produce un estado mental semejante al de una meditación. profunda; los tratamientos regulares reequilibran las funciones psicofísicas y restablecen su dinámica. Se observa la normalización de la presión sanguínea, el fortalecimiento del sistema inmunológico y el restablecimiento de las funciones reguladoras del sistema químico hormonal formado por las glándulas endocrinas.
El ser canal de Reiki, también permite recibirlo, ya que la energía no discrimina, sólo fluye a través de nosotros limpiándonos y armonizándonos a la par del receptor de nuestra sesión.
Si bien, tiene bases teóricas el Reiki es, sobre todo práctica que nos proporciona Paz, Relajación, Contención y un suave Amor que nos guía.
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